MARAVILLAS DE CASTILLA Y LEÓN: CRIPTA DE SAN ANTOLÍN, PALENCIA

La cripta de San Antolín, situada bajo la actual CATEDRAL DE PALENCIA es el único resto de la primitiva catedral visigótica construida en la segunda mitad del siglo VII, durante el reinado de Wamba, para conservar los restos del mártir y patrón de Palencia, San Antolín, (Antonin de Pamiers), noble galo-visigodo traído de Narbona a Hispania en 672 o 673 por el propio Wamba, cuando era obispo Ascario.

Según la leyenda recogida en el cantar de gesta “las Mocedades de Rodrigo”, estando de caza el rey Sancho III el Mayor le persiguió un jabalí y el monarca se refugió en una hoya situada en el lugar que hoy ocupa la cripta de San Antolín. La fiera lo alcanzó en ella y, cuando el rey se dispuso a alancear al animal, su brazo quedó paralizado, lo que le hizo comprender que estaba en lugar sagrado. Descubre entonces el Rey la tumba del Santo, cuyo cuerpo incorrupto reposaba en un sarcófago y sobre él, en una hornacina, se encontraba una imagen de la Virgen. Imagen que, con el tiempo, tomaría el nombre de Virgen de San Antolín o Nuestra Señora de San Antolín.

En 1035, ante la presencia del rey Sancho III el Mayor, de la corte y de varios obispos, se consagró el nuevo edificio, con lo que quedó configurada la Cripta de san Antolín tal y como puede verse en la actualidad.

Al fondo, imposible de acceder en nuestra visita por lo acumulación de agua en el suelo de la cripta, se encuentra el espacio primitivo y más interesante, la zona visigótica.

Primer plano de las columnas visigodas.
Foto recogida de:https1.bp.blogspot.com-9YiqXYBJEXMU2TPc-3IA1IAAAAAAAAPrc6K8Vl1fA3scw800-h53303.JPG

Ya en el siglo XII se edificó un templo románico que respetó la parte soterraña de la cripta, añadiéndose posteriormente otras construcciones, tanto románicas como góticas y platerescas, lo que representa la configuración actual de la CATEDRAL DE PALENCIA. A finales del siglo XIX, principios del XX por unas obras de remodelación de la catedral se descubre la capilla de San Antolín, que aunque se sabía de su existencia, permanecía hasta entonces olvidada. No es de extrañar que a esta Catedral se le conozca como la Bella Desconocida.

Durante siglos, la puerta de acceso a esta cripta se situaba en el lado derecho del edificio prerrománico construido por Sacho III y que comunica con la catedral por aquel entonces románica. Es en el S XVI cuando se construye el trascoro y se abre la actual puerta de entrada a la cripta, adornada a ambos lados de la parte baja de la escalera con los escudos del obispo Fonseca, patrocinador de la obra, y sobre ellos, bellos relieves renacentistas, a la derecha el martirio de san Antolín y a la izquierda la leyenda antes mencionada del rey Sancho III.

Como en todas las construcciones visigóticas, disfrutaba de una fuente de agua con poderes milagrosos, o curativos, al ejemplo de LA FUENTE DE RECESVINTO EN BAÑOS DE CERRATO. El pozo con brocal del siglo XVI que hoy vemos, coetáneo a la construcción de la actual escalera de acceso, todavía sigue atrayendo gente en romería el día del patrón San Antolín, el 2 de septiembre.